Siempre celebramos las grandes victorias y los momentos cuando nos encontramos en la cima.
Y vivimos convencidos que Dios está con nosotros solo cuando nos va de maravilla. ¿Pero, que de aquellos momentos de angustia, tristeza y de fracaso? ¿Sera posible que Dios nos abandona en esos momentos de dificultad?
Aunque no lo veamos, ni lo sintamos en esos momentos, no quiere decir que el no esté con nosotros. Nuestros sentimientos y todo el ruido nos aturde y no nos permite verle, ni oírle. Pero te garantizo que Dios está contigo, aún en ese valle por el que estás pasando.
“Aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra.”
— Salmos 139:10
Aún allí, en ese momento, el peor momento de tu vida. Allí el té guiará y te sostendrá.
Ten buen ánimo y confía en el Dios que a prometido estar contigo todos los días de tu vida.