¿A cuántos nos gustan los resultados? Nos encanta poder ver el fruto de nuestro trabajo.  Pero hay temporadas en las que los resultados se tardan en llegar.  Pero, no te apresures a marcar ese tiempo de espera como un fracaso.  Te invito a que seas paciente.  

Hay temporadas que lo único que nos dejan es la esperanza y fe que mañana será mejor. Es un tiempo en el que invertimos y trabajamos pero no cosechamos.  En estas temporadas te aconsejo a que no te desesperes.  Tenle fe al proceso. A su tiempo lo que sembraste dará su fruto.  

Hace mucho tiempo vivió un hombre llamado Bartimeo.  Todos en la ciudad lo conocían como el ciego Bartimeo.  Este hombre hacia lo único que podía hacer, el mendigaba, para sobre vivir. Pero me impresiona, que aunque su situación era permanente, secretamente el tenia la esperanza de que un día todo cambiaria.  Creo que no se lo decía a nadie porque él restaurar la vista era y sigue siendo imposible. Pero esto no lo detuvo de soñar.  

Un día mientras que el mendigaba escucho rumores de un hombre que tenia la habilidad de hacer cosas imposibles.  Dentro de Bartimeo se activo aquello que él había soñado. Quizás esta era la oportunidad que él necesitaba para que su sueño se realizara.   

En eso escucho que multitudes de gente venían en su dirección.  Él supo que este hombre estaba lo suficientemente cerca.  ¿Pero cómo acercarse siendo el ciego? Si los que tenían vista no se podían acercar, que esperanza había para él. 

Pero en un momento de alumbramiento este hombre hizo algo increíble.  ¡No se dio por vencido! Él hizo lo único que podía hacer.  Empezó a gritar con todo lo que daban sus plumones y su garganta.  Este escándalo causo que la multitud le pusiera atención.  Fue tanto el escándalo que la gente dejo de enfocarse en el hombre que hacia cosas imposibles y lo empezaron a callar.  

Esto despertó curiosidad aun en el hombre que hacia lo imposible y se acerco a este ciego.  Entonces le pregunta el motivo de su escándalo.  Bartimeo explica que él es ciego y que él quiere recobrar la vista.  El hombre que hacia lo imposible le concedió su petición y Bartimeo dejo de ser ciego.  

Aunque los resultados que esperamos parezcan ser imposibles de lograr, jamas debemos de perder la esperanza que algún día se podrán realizar. Aunque Bartimeo no veía cómo su sueño se podría realizar.  Él se mantuvo esperanzado.  Quizás usted a trabajado sin ver resultados.  Pero no pierda la esperanza su oportunidad, aunque en el presente parezca imposible, en algún tiempo se presentara.